domingo, 14 de abril de 2013

La Niña musa


Alice Liddell
vista por Claerwen James
referencia

Alicia cumple los cien

De “El Escribidor Intruso”
José Donoso
agosto de 1962


“Este año la pequeña Alicia ―la de En el País de las Maravillas― cumple la respetable edad de cien años. Y como lo merece una señorita que se ha hecho famosa, llegando a ser un personaje clásico, como Falstaff o Sherlock Holmes, en Inglaterra, su país de origen, su centenario se celebrará con gala: exposiciones, publicaciones, conferencias.

En los cien años pasados, la fama de Alicia ha ido en perpetuo crecimiento. ¿Pero qué le sucederá en los próximos cien años? La afición de los niños se aleja cada día más de este tipo de fantasías y exigen, por lo menos, aventuras interplanetarias. Pero, además de ser un libro para niños, Alicia ha llegado a ser libro para adultos inteligentes, para profesores que estudian sus orígenes, y críticos que la colman de significado. Si los niños la abandonan, seguramente los adultos la heredarán con sumo agrado.

En 1862, un profesor de alta matemática de la Universidad de Oxford, llamado Charles Lutwidge Dodgson salió a dar un paseo en bote por el río, con tres niñas, hijas de su colega, el doctor Liddell. Su preferida era la pequeña Alicia, de cuatro años. Y durante la excursión para mantener a sus amigas tranquilas les fue contando las aventuras de Alicia. No fue hasta más tarde que escribió el libro, que salió en 1865. Pero todo comenzó en aquella excursión veraniega de julio de 1862.

Cuando apareció Alicia en e País de las Maravillas, llevaba la firma de Lewis Carroll. No es de extrañarse. Su autor era un solterón serio, tímido y sensible, uno de los más brillantes profesores de alta matemática de la Universidad de Oxford, que al final de su vida había publicado casi veinte tratados sobre complicados temas matemáticos, que firmaba con su verdadero nombre, porque esperaba que con ellos alcanzaría auténtica y perdurable fama. Era un gran aficionado a la fotografía y vivía con sus hermanas, en una casa con jardín, cerca de la Universidad.

Este solterón tan completamente circunspecto y mesurado tenía una afición curiosa: a pesar de nunca haberse enamorado en toda su vida solía hacerse amigo del alma de niñitas de cuatro hasta diez años, gustándole mucho protegerlas y divertirlas con los cuentos que inventaba. Los psicologizantes entre los críticos, han entrevisto en esta afición intenciones mucho más perversas que las de Humbert para con Lolita. Pero el profesor de matemáticas  tierno, bien educado y victoriano, jamás se dejó llevar por los encantos de sus jóvenes amigas. Alice Liddell, hija de un colega, fue su gran amiga hasta que ésta cumplió los diez años, y después la vio poco. A ella se debió la inspiración para sus dos obras maestras: Alicia en el País de las Maravillas y Alicia a través del espejo.

Ambas obras tuvieron gran éxito al publicarse a pesar de que dos de los dioses de entonces, el escritor Tharkeray y el Ministro Gladstone, la encontraron aburrida…” 

Escrito por José Donoso, El Escribidor Intruso, en agosto de 1962 
Como parte de una crónica de la Revista chilena “Ercilla



Alicia - ilustración original
John Tenniel 


"Alicia" de Arthur Rackham


Arthur Rackham

"Alicia" en versión de Charles Robinson



ilustración de Maggie Taylor


"Alicia" de Alison Jay




"Alicia" de Shiori Matsumoto



ilustración de Hiromisato



ilustración de Gordon Robinson



ilustración de  Kaori  Ogawa



Ilustración de Maraja




ilustración de Ester García


ilustración de Titti Garelli

7 comentarios:

Francisco Méndez S. dijo...

¡¡Precioso todo!! las ilustraciones, maravillosas. El comentario de José Donoso muy ilustrativo y bien narrado.
Alicia...gusta mucho a los niños, cuando se lee de adulto, se nota un inteligente uso de las paradojas matemáticas y critica social.

"Tras leer la acusación, la Reina de Corazones pregunta a Alicia: “Y ahora que… ¿estás lista para oír la condena?”, a lo que la niña responde: “¿Condena?, pero si todavía no me han juzgado”; la Reina, enrojecida de ira, le espeta: ¡La condena es primero! El juicio vendrá después." y así otros ejemplos.

Es curioso antes de leer esta entrada, estaba leyendo la historia de Margarita Debayle, otra niña musa de Rubén Darío.

Margarita está linda la mar,
y el viento....

Un abrazo querida amiga

Clarissa Rodriguez dijo...

Francisco, querido amigo, gracias por tus valiosos aportes que enriquecen este post.

Alicia hoy ya tiene 150 años, no ha perdido vigencia y seguirá abriendo puertas maravillosas, en especial aquellas trabadas por "lo real" y "lo lógico"

Continua El Escribidor Intruso:
Alicia puede ser todas estas cosas, porque los libros y las obras de arte verdaderamente grandes son muchas cosas al mismo tiempo...
Es cierto que el profesor Dodgson quedó fijado en su propia niñez: era tartamudo hasta para dar clases de trigonometría, pero cuando hablaba con niñitas, mágicamente desaparecía su tartamudez. Es cierto que durante cuarenta años llevó un diario de vida insignificante y aburrido. Pero más cierto que todo es que "Alicia en el País de las Maravillas es ese curioso tributo a la niñez que los escritores raramente le pagan: tratar a los niños como seres inteligentes...

Clarissa Rodriguez dijo...

Quedé deslumbrada el día que supe que Margarita Debayle existió.

Dice la información wiki:
"Margarita Debayle Sacasa de Pallais (nació el 4 de julio de 1900, León, Nicaragua - murió el 19 de diciembre de 1983, Lima, Perú). Conocida mundialmente por ser la famosa musa del poeta Rubén Darío en su poema A Margarita Debayle."

¿Quién no soñó con
un palacio de diamantes,
una tienda hecha del día
y un rebaño de elefantes...


Un abrazo muy grande querido Francisco

Eva Ferrer dijo...

Tan hermoso resultó leer la bella entrada, como los valiosos comentarios que la enriquecen, sobre todo cuando vienen de mis dos amigos del alma.
Gracias a los dos por todo lo que aprendo de vuestra mano.
Un abrazo, querida amiga.

Ars Vitae dijo...

Me ha encantado leer ese texto de Donoso. Y las ilustraciones. La última me encanta, me recuerda a mi sobrina.

¿Puedes creer que de pequeña me daba miedo el cuento de Alicia?

Un abrazo.

Clarissa Rodriguez dijo...

Eva, querida amiga. Muchas gracias por tus amables palabras.

Alicia nos enseña una y otra vez lo que significa adaptarse a las circunstancias más extraordinarias, despojarse de prejuicios y llegar a ver la poesía de un mundo muchas veces absurdo.

Un abrazo muy grande

Clarissa Rodriguez dijo...

Ars Vitae,
Los textos de José Donoso nos transmiten el arte de un gran narrador.

Te daba "miedo" leer las aventuras de Alicia, quizás queriendo protegerla de ese mundo tan "singular" y en cierto sentido amenazante. Creo que tienes un corazón muy compasivo y bondadoso.

Hay quienes ven, en la caída de Alicia por la madriguera, un símbolo del trauma del nacimiento...¿?

Tu sobrina debe ser una personita muy preciosa

Un gran abrazo

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