Del clásico Casablanca película dirigida por Michael Curtiz - 1942 |
Remedios Varo 1908 - 1963 Adios |
Adiós
Gabriela Mistral
Gabriela Mistral
En costa lejana
y en mar de Pasión,
dijimos adioses
sin decir adiós.
Y no fue verdad
la alucinación.
Ni tú la creíste
ni la creo yo,
«y es cierto y no es cierto»
como en la canción.
Que yendo hacia el Sur
diciendo iba yo:
«Vamos hacia el mar
que devora al Sol».
Y yendo hacia el Norte
decía tu voz:
«Vamos a ver juntos
donde se hace el Sol».
Ni por juego digas
o exageración
que nos separaron
tierra y mar, que son
ella, sueño y el
alucinación.
No te digas solo
ni pida tu voz
albergue para uno
al albergador.
Echarás la sombra
que siempre se echó,
morderás la duna
con paso de dos...
Para que ninguno,
ni hombre ni dios,
nos llame partidos
como luna y sol;
para que ni roca
ni viento errador,
ni río con vado
ni árbol sombreador,
aprendan y digan
mentira o error
del Sur y del Norte,
del uno y del dos!
Poema incluido en su libro "Tala" - publicado en 1938
y en mar de Pasión,
dijimos adioses
sin decir adiós.
Y no fue verdad
la alucinación.
Ni tú la creíste
ni la creo yo,
«y es cierto y no es cierto»
como en la canción.
Que yendo hacia el Sur
diciendo iba yo:
«Vamos hacia el mar
que devora al Sol».
Y yendo hacia el Norte
decía tu voz:
«Vamos a ver juntos
donde se hace el Sol».
Ni por juego digas
o exageración
que nos separaron
tierra y mar, que son
ella, sueño y el
alucinación.
No te digas solo
ni pida tu voz
albergue para uno
al albergador.
Echarás la sombra
que siempre se echó,
morderás la duna
con paso de dos...
Para que ninguno,
ni hombre ni dios,
nos llame partidos
como luna y sol;
para que ni roca
ni viento errador,
ni río con vado
ni árbol sombreador,
aprendan y digan
mentira o error
del Sur y del Norte,
del uno y del dos!
Poema incluido en su libro "Tala" - publicado en 1938
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2 comentarios:
Hermosísimas imágenes de los tristes adioses y preciosa poesía de la gran Gabriela Mistral.
Adiós, "a Dios", sí, pero prefiero que te quedes conmigo, que para ir a Dios aún nos queda tiempo...
Un abrazo, Clarissa.
:)
Dona Eñe, gracias por tu visita.
Son muchos los adioses en nuestra vida, antes de llegar al momento en que nos digan adiós, en la partida final.
Mario Benedetti lo dice más o menos así en su "Adios":
"Adiós a la inocencia, como le ocurre al niño
Adiós al hambre con un buen asado
Adiós a las armas, escribió Hemingway
Adiós a los sueños, cuando canta el gallo
Adiós a la anestesia, cuando vuelve el dolor
Adiós al silencio cuando arranca la bulla
Adiós a la memoria, cuando gana el olvido"
Un gran abrazo, querida amiga
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