Marc Chagall Interior con flores |
LAS VENTANAS
Constantino Cavafis
En estas oscuras piezas, donde paso
días agobiantes, voy y vuelvo arriba abajo
para hallar las ventanas. -Cuando se abra
una ventana habrá un consuelo- .
Mas las ventanas no están, o no puedo
encontrarlas. Y mejor quizás que no las halle.
Acaso la luz sea un nuevo tormento.
Quién sabe qué cosas nuevas mostrará.
Edward Hopper 1882 - 1967 |
Edward Hopper 1882 - 1967 Luz solar en la cafetería |
Boris Kustodiev Día de invierno |
Elizabeth Nourse 1860 - 1938 La lección de costura |
Winslow Homer 1836 - 1910 Mirando hacia el mar |
Winslow Homer 1836 - 1910 Belleza matinal |
Vincente Van Gogh 1853 - 1890 |
“No
soy nada.
Nunca seré nada.
No puedo querer ser nada.
Aparte de esto, tengo en mí todos los sueños del mundo.
Ventanas de mi cuarto,
de mi cuarto de uno de los millones de gente que nadie sabe quién es
(y si supiesen quién es, ¿qué sabrían?)”
Nunca seré nada.
No puedo querer ser nada.
Aparte de esto, tengo en mí todos los sueños del mundo.
Ventanas de mi cuarto,
de mi cuarto de uno de los millones de gente que nadie sabe quién es
(y si supiesen quién es, ¿qué sabrían?)”
Fernando Pessoa
de su extenso poema “Tabaquería”
Egon Schiele |
Konstantin Makovsky Zhukovsky En la ventana abierta |
Balthus Niña en la ventana |
Helena Maguire 1860 -1909 |
Frederick Childe Hassam 1859 - 1935 New York, ventana en invierno |
Konstantin Yuon Ventana a la naturaleza |
Carl Larsson Cuando los niños se han ido a la cama |
"Desde la ventana hay una bella vista sobre el lago,
pero esta vista no es capaz de verse a sí misma.
Incolora, informe,
inaudible, inodora
e indolora vive en este mundo"
Wislawa Szymborska
de su poema "Paisaje en un Grano de Arena"
Ferdinand Hodler El zapatero junto a la ventana |
Las ventanas como “motivo” aparecen diseminadas a lo
largo de poemas, pinturas y películas. Siempre cargadas de simbolismo, son como
una “presencia de la ausencia” o una “acción inactiva”, así lo definen algunos expertos.
Me quedo con la idea de que son una expresión del ánimo
que, del mismo modo como hacen nuestros cinco (¿son cinco?) sentidos, nos abren o
clausuran a otros mundos, a un horizonte situado en el pasado, o en el futuro; porque
una ventana es también la posibilidad de volar, aun desde la seguridad y calma
de una actividad cotidiana, realizada a la luz de unos cristales.